¡Muy buenas, Gente con Botas!.
Esta noche tocan a despedida. Y es que hoy ha cerrado un increíble capítulo de su vida nuestro amigo RUBÉN MARTÍN, y lo que hasta hoy es el ALBERGUE LA MARISICA de Obón (Teruel). Tras unos cuantos años (7 creen por aquí) comienza una nueva andadura y nos deja absolutamente HUERFANOS de cariño, buenos ratos, ambiente distendido... .
Qué decir de un lugar en el que siempre se te recibía con una SONRISA, con un ABRAZO (el es un tío intuitivo y sabe cuando te hace falta un achuchón), un apretón de manos sincero…
Rubén ha estado no solamente gestionando el albergue, no. Ha mirado dónde había una necesidad: una pasarela rota para apañarla; ese huerto ecológico que montó un tiempo con su padre; si un subidor necesitaba un empujón, ahí estaba el; esa pared en el muro para hacer escalada; esas podas varias colgado de una cuerda; ese par de años de colonias con los críos; la organización impecable de la OBONCROSS... a parte de ponernos una cervecita y música en un paraje sin igual... todo ello Y MÁS hacen de el un "personaje" inconmensurable.
Ha sido el embajador de nuestro pueblo por muchos lugares, entre otras cosas, gracias a la televisión.
Todo ello en un pueblo donde viven menos de 40 personas la mayor parte del año (sobre todo en los meses más fríos) es un plus muy a tener en cuenta.
Anoche volvió a ser una gran noche en La Marisica... niños jugando entre adultos que oíamos a quien quería cantar (o tocar un instrumento) al amor de la luna. Un campeonato de futbolín "sintenerqueecharmonedasmami", donde si tenías sed te ponías tu bebida y echabas lo que te parecía a un cubico; donde se cantaron jotas, blues, soul, "lloronas" (más de una hubo) y un discurso lleno de sentimiento del amigo José Enrique...
Lo dicho un día (y noche) espectacular que quedará para siempre en nuestro recuerdo, Rubén, que sepas que hubo una "banda" a la que se le cayó alguna lágrima de pena porque te vas, de alegría por todo lo que nos has hecho disfrutar, de rabia porque no hemos sabido retenerte...
No volverá a ser lo mismo ese albergue, era "el sitio de recreo" de muchas personas y "bichos"... pero no te lo vamos a tener en cuenta, no, y te deseamos muuuuucha suerte en tu nueva andadura.
Eso sí, no te olvides dónde se te quiere y vuelve muy pronto a vernos a TU PUEBLO.
La semana que viene más y más alegre...
¡¡Somos, Carol y las Botas de 7 Leguas!!
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